Yo,
soy costumbre,
séptima jornada hábil,
sin decir, sentencia.
Soy retraído rescoldo
aguardando apacible
desconocidos sucesos.
Soy vida en sueños,
mar de auto engaños,
sorprendente bitácora
de lágrimas y tristezas.
Cómplice
de carcajadas,
espejo
de necesidades.
Fecundo
soñador iluso,
romance
en sombras,
lejanía
de extrañezas
para
que algo pase.
Leer tu poema es igual que presenciar al escultor labrando su pieza...
ResponderEliminarSaludos