Te recorro,
en la convergencia honda
del momento que no es.
Renazco,
en las reflexiones del espejo
de nuestros silencios de agua
Malpienso,
en la húmeda flor sin pétalos
donde bebo de tus vertientes.
Reflexiono,
que se me hizo tarde la vida
en la burocracia del absurdo.
Incendio,
pastizales de arrogancias
camino a un lamento mudo.
Atardezco
cuidador de leyendas olvidadas
en alguna situación extraña.
Fantasmal,
me llevo a inmolar, en jirones,
en las playas de tus avideces.
Conquistado,
existo hasta sacarme, de a una,
toda las cicatrices de lejanías.
Luego soy.
Un abrazo estimado poeta..muchas gracias por tu hermoso saludo en mi blog. Para mi es un gusto compartir con vos, venir a visitarte, a veces en silencio y otras, dejandote alguna palabra. Tu poesia, como siempre, elegante, madura en estilo y sabiduria...una puerta abierta para incursionar en nosotros mismos. Que tengas un gran 2012..y a mucha poesia.
ResponderEliminarCada jirón se ha expuesto como una solitaria flor con su peculiar aroma.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho este poema.
Y todo el blog, (además es muy elegante.)
Saludos.