Tú
soportas un silencio
floreciendo
en tus pechos.
Relicario
de matriz vacía,
prólogo
de todos los días.
Prematuro
por naturaleza,
se
prefiere a tus recuerdos.
Una
canción de sombras
esparce
polen de olvidos,
a veces
es solo ausencia,
en otras
augurio oscuro.
Lo
soportas, pese a todo,
y
escondes su presencia
en
esa mudez callada.
Te ilusiona
el esperar
un sábado
junto a él,
migrante
orfebre desertor
que
se negó a esculpir
la
joya de tu corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario