Me
gusta saber adónde vamos,
si la
grieta que habita el cuerpo
atrapará
con la mano el pecho.
Si verdes
amores falsificaran
sombras
donde cava el deseo.
Anoche,
escondido y en calma,
no
pude decirme estas cosas,
no lo
conseguí por los truenos,
el mal
tiempo del corazón latiendo
y el
ruido de unas casas más abajo.
No
quise dejar que todo ese silencio
se deshiciera
con pensamientos.
Ilustración: "s/n" - Mayra Alejandra Otero
Es un poema que transmite sensibilidad y paz.
ResponderEliminarSaludos!