Anoche, destejiendo una noche de insomnio,
te soñé sin soñarte. El despertar
me dejó sabor a herrumbre en la boca.
Olvidé mis manos y mis brazos este sábado.
No las necesito, no tengo secretos que decirte.
La última tarde no nos despedimos de nada,
te fuiste y mi sueño se perdió en el sur.
Ilustración: "Herrumbre" - Pilar Labajo Rabanillo
No hay comentarios:
Publicar un comentario