Hay momentos en que me siento
hurgador de letras muertas,
alquimista de consonantes,
carpintero de vocales,
constructor de palabras sueltas
que solas se arman en papel.
Y hay momentos en que solo me veo
equilibrista de mis pensamientos,
sin poder volcar en la pluma
frase alguna que refleje
la tumultuosa volatilidad
de mis alocados sentimientos.
Y hay momentos en que me basta
pronunciar por lo bajo tu nombre,para saberme vivo. Entero
Necesito saber que exististe me exijo noche a noche recordarte, extrañarte, buscarte en algún vestigio de luna derrapando por la persiana.
El sudor humedece mi espalda, inoportuno calor en marzo, la noche se expande lenta y pesada entre mis piernas encogidas que aprietan mis manos entre ellas
Añorando tu espalda, tu pecho, tu pelo bordado de plata y tu boca con sabor al último trago de chandon mezclado con el humo de tu cigarro veo pasar la noche de ojos abiertos.
Necesito saber que no fuiste un sueño, me obligo a pensarte buscando cada rasgo de tu rostro en esa evocación. Corre por mi cuerpo una rara sensación como si tus dedos bajaran hasta mi talle por mi espina, y mis caderas recuerdan su galope sobre tu cuerpo desnudo, cálido como esta noche donde necesito como nunca, extrañarte para saber que fuiste cierto y no la loca pesadilla que pinta ojeras en mi rostro cansado de insomnios bañados de sudor.
BUENO UD ME DIO PERMISO, BUENAS NOCHES Y MUY BUEN FIN DE SEMANA A TODA POESIA
Necesito extrañarte, para no ser ausente.
ResponderEliminarTE LO ROBARIA PERO ES ABUSIVO ROBARTE TANTO, UN PLACER, GRACIAS POR ESCRIBIR
NECESITO EXTRAÑARTE
ResponderEliminarNecesito saber que exististe
me exijo noche a noche
recordarte, extrañarte,
buscarte en algún vestigio de luna
derrapando por la persiana.
El sudor humedece mi espalda,
inoportuno calor en marzo,
la noche se expande lenta y pesada
entre mis piernas encogidas
que aprietan mis manos entre ellas
Añorando tu espalda, tu pecho,
tu pelo bordado de plata y tu boca
con sabor al último trago de chandon
mezclado con el humo de tu cigarro
veo pasar la noche de ojos abiertos.
Necesito saber que no fuiste un sueño,
me obligo a pensarte buscando
cada rasgo de tu rostro en esa evocación.
Corre por mi cuerpo una rara sensación
como si tus dedos bajaran hasta mi talle
por mi espina, y mis caderas recuerdan
su galope sobre tu cuerpo desnudo, cálido
como esta noche donde necesito como nunca,
extrañarte para saber que fuiste cierto
y no la loca pesadilla que pinta ojeras en mi rostro
cansado de insomnios bañados de sudor.
BUENO UD ME DIO PERMISO, BUENAS NOCHES Y MUY BUEN FIN DE SEMANA A TODA POESIA