Una
flecha fatal
gira y
se deshoja
en el
horizonte,
rasga la
costura
de las
cosas,
y, aturdida,
avanza
sobre las
algas
de los
caprichos.
Se
aleja. Se acerca
con eco
de capullo.
Un
silencio ajado
suena a roto
en el temblor
de la memoria.
Bonito poema.
ResponderEliminar"Un silencio ajado
suena,
algo se ha roto
en el temblor de la memoria".