domingo, 6 de noviembre de 2011

Guijarros




Al doliente sollozo de tu música,
caro rabadán de brumas,
lo espera brincando en el viento
la lúcida arena, con sus manos
cargadas de sales marinas.
Mientras el triste pescador sombrío,
capeando épico la tormenta,
acarreando el batel llamado olvido,
todavía sueña con la casa
que algún día tendrá en la playa.
El villano a medio vivir,
añora sus colmillos de guerra
perdidos del otro lado de la luna
un desdichado viernes absoluto,
en que se distrajo cayendo en el placer.
Mi acompañante eterna,
vanidosa de su extrema importancia,
ensaya la erótica de lo artificial
restregando a su paso los guijarros,
buscando aquel que logre atraparla,
para que su corazón de sombra
por fin deje de llorar.

2 comentarios:

  1. Un placer regresar siempre a tus sitios.Fascinantes tus trabajos.
    Muy agradecida por tu visita a mi blog y cálido mensaje.Gracias por estar siempre .
    Buen inicio de Semana
    Abrazos y besos fraternos
    Raquel Luisina Teppich

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  2. Un poema estupendo, con muy buenas imágenes. Me ha encantado. Bello blog. Por razones de baja señal, no he podido ponerme como seguidora. Ojalá no olvide el camino para volver. Un abrazo.

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