miércoles, 9 de noviembre de 2011

Por entonces


Acariciando libros
y miradas ocultas
venías con falda
en el patio de la escuela.
La tiza manchaba tu pelo
escondiendo celoso
las capullos de tus ojos.
Eras linda para siempre,
despertar del amor juvenil.
Pero por entonces, eso,
no lo supe en  mí.

1 comentario:

  1. quién pudiera volver a esos tiempos...
    leer este pequeño poema, me recordó esa época feliz :)

    cariños
    claudia

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