martes, 25 de julio de 2017

En un parpadeo


En el azul se dilata tu silencio pequeño,
un ronroneo que se deshoja, trepando
por las sombras de las noches negras,
tropieza en mi pecho y se enreda fértil
en mi cuello. Allí se arraiga por horas,
cercano, hasta que el alba se involucra
y lo convierte en balbuceos de modorra.
En secreto, sin luz ni guía, se derrama
paso a paso en esas vocecillas taciturnas
que anuncian tu lento y pesado despertar.
Con aires de minina, te estiras efímera
en tu intento de permanecer acurrucada,
cobijando los últimos fragmentos del sueño,
hasta que la orquesta distante de un cosmos
ciudadano te trae a tu realidad cotidiana.
De un salto abandonas el lecho y corres
a iniciar las góticas faenas de días imperfectos.
Año tras año de todo ello me he deslumbrado,
y aun no me acostumbro a ese corte visceral
que en un parpadeo, me deja solo en el lecho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario