martes, 1 de septiembre de 2015

Plato de sopa


Antes de olvidar,
enhebra trenes
mientras revuelve la sopa.
Muchos años han pasado.
Ahora, mira por la ventana,
allí está el ferrocarril
bailando alegremente
sobre rieles de plata.
Una línea que corre
por el piso de parqué,
que lleva hasta el puerto,
hasta el anclado barco
de turbinas sonoras,
levemente escorado
sobre la alfombra azul,
donde un hombre triste
bebe coñac y fuma.
Casi instintivamente
el niño se desvanece,
se lleva consigo el tren
y también el plato de sopa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario